Estas jornadas se celebraron en el marco del I Encuentro Internacional Fundación Isabel Martín, que sirvió de acercamiento entre algunas de las contrapartes con las que colaboramos, en los países de India y Venezuela, tanto con la Fundación como con entidades de Zaragoza.
En ellas, responsables de proyectos de cooperación, a los que apoya nuestra organización, compartieron sus experiencias y, especialmente, la problemática de las mujeres tribales aborígenes o adivasis y de otras comunidades desfavorecidas, como los dalit o ‘intocables’, estigmatizados por estar fuera del sistema de castas.
El término adivasi se refiere a las personas indígenas del país que, pese a representar el 8% del total de habitantes, constituyen un cuarto de la población más pobre, siendo las mujeres las más vulnerables. Las principales tribus con las que trabajan nuestros socios locales en India son los katkari, warlis, bhil y santhal.
La mesa redonda sobre los retos en derechos fue el pistoletazo de salida de estas jornadas que prometían ser más que un simple encuentro entre entidades. Y es que, conforme tenían lugar las ponencias y las conversaciones, más puntos en común iban surgiendo.
Vaishali Patil, directora asociada y secretaria de Ankur Trust (Pen, Maharashtra) arrancaba dos intensos días de exposiciones poniendo sobre la mesa la realidad de los Katkari y el desafío de la migración al que se enfrentan: una comunidad tribal, castigada por la anulación de sus derechos sobre sus tierras y el acceso al agua, que ve cómo gran parte de su población tiene que dejar su hogar y buscar una vida mejor en las ciudades.
Esta capacitación de las chicas más jóvenes, 25 en total, será un apoyo fundamental para las actuales líderes adultas. En palabras de Vaishali, «el impacto del programa de liderazgo es real, por la fortaleza de las mujeres, la confianza en ellas mismas y en su comunidad». Además, gestionan un internado para que sesenta y cinco hijos e hijas de migrantes que trabajan fuera de la zona puedan continuar con su educación y tengan las mismas oportunidades.
Durante el debate que se abrió después, surgieron temas clave. Noella De Souza (Avehi Public Charitable Trust, Maharashtra), destacaba el reto del acceso al agua de boca y regadío, así como la lacra de los matrimonios infantiles. Problemas comunes con otras entidades como los que planteaba Louise Mary Innasi, administradora de Assumpta Society (Jarckand): «Trabajamos con los Santhals en Gomia, una tribu muy reservada. Llevamos años yendo casa por casa para que nos tengan confianza. Para ello, tenemos programas de formación para las mujeres, las vamos a buscar a sus hogares y las convencemos de que salgan y luchen por sus derechos».
De izquierda a derecha: Noella de Souza (Avehi Public Charitable Trust), Vaishali Patil (Ankur Trust), Louise Mary Innasi (Assumpta Society) y Sara Gutiérrez (Fundación Isabel Martín).
Todas, además, coinciden en el desafío que supone la educación. Según su experiencia, el sistema del gobierno es deficitario y muchos niños y niñas no acuden a las escuelas porque tienen que trabajar. «Acudimos a los pueblos por las tardes y les enseñamos, incluso debajo de un árbol, porque sabemos que son el futuro. También hablamos con los padres para que se den cuenta de la importancia de educarles» (Louise Mary Innasi).
La mesa redonda sobre retos en empoderamiento económico tuvo como ponente principal a Pratixa Parmar, directora del Jagruti Kendra (Gujarat), quien mostraba los detalles de su programa de cooperativas de crédito para mujeres tribales con el objetivo de alcanzar su empoderamiento político, social y económico. «Al principio, los hombres eran reacios a que sus mujeres trabajasen y tuvieran libertad financiera. Creían que les enseñábamos a luchar contra los hombres y a querer ser mejores que ellos, pero como veían que entraba dinero en el hogar, ningún hombre se opone ahora».
En la sesión de debate, Johny Joseph, director de la cooperativa de Comercio Justo Creative Handicrafts en Bombay, explicaba otra dificultad añadida en este sentido. «Muchas personas vienen a los slums de Bombay (barrios marginales) escapando de la discriminación del sistema de castas a la que se enfrentan en las zonas rurales, ya que si perteneces a una ‘casta baja’ no tienes vida literalmente. No tienes acceso a la educación o al agua y no tienes ninguna oportunidad social y económica». Y añadía: «ofrecemos a las mujeres la oportunidad de ser económicamente libres, con nuestro programa laboral y de microcréditos».
Por la tarde, fue momento de abordar el reto del medio ambiente y la soberanía alimentaria. Anaclet D’Mello, director de Bosco Samajik Viakas Sanstha -BSVS- (Maharashtra) planteaba el caso de éxito del proyecto de Agricultura Natural de Presupuesto Cero, apoyado por la Fundación, y del que ya se benefician 120 familias: «Gracias a la construcción de mini presas y de este proyecto de agricultura natural, se controla la migración, se mejora la salud, los hábitos alimenticios y pueden criar mejor a sus hijos».
De izquierda a derecha: Jeannette Makenga (CEPIN), Edurne Caballero (CERAI) y Rosalía Riambau (Fundación Isabel Martín).
En este panel de expertos, pudimos escuchar también a dos entidades invitadas que desarrollan proyectos de agroecología. Primero fue el turno de Jeannette Makenga, directora del Centro de Promoción Integral del Niño (CEPIN) en Maracaibo, Venezuela, que explicaba el caso de éxito de los huertos familiares en Barrio Etnia Guajira y Cañada Urdaneta: «En muy poco tiempo se vio el impacto. Veíamos evidencias en el físico en las personas, por lo que comían con su propia producción. Eso hizo que otros vecinos quisieran unirse al proyecto. De las diez familias que empezaron, hoy son cincuenta».
Por su parte, Edurne Caballero, presidenta de CERAI, ONG española especializada en el desarrollo agrícola y con la que colaboramos para apoyar al CEPIN en ese programa, determinaba la necesidad de «un cambio de paradigma, donde se ponga a las personas y al planeta en el centro. Pensar en términos de sostenibilidad humana y ecológica y no en términos de rentabilidad económica».
El colofón final de esta primera jornada vino de la mano de nuestro coro «Voces Trenzadas» y de la agrupación musical «Marx que voces», que hizo las delicias de todo el auditorio para terminar el día por todo lo alto.
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Noella De Souza inauguraba el segundo día de jornadas exponiendo los retos en educación a los que se enfrentan desde su proyecto Avehi (Maharashtra): «La gran dificultad para nosotras es el propio gobierno. Solo hay educación obligatoria entre los 6 y los 14 años. ¿Qué pasa con la infancia entre 0 y 6 años? ¿Y los adolescentes de entre 14 y 18 años?». (…) «Basamos nuestro sistema educativo en valores como la justicia social y la igualdad». (…) «Con el proyecto llegamos a 47.000 estudiantes». (…) “El impacto es real y es que terminan teniendo la capacidad de pensar por ellos/as mismo/as y no quedarse en el sistema de repetir y simplemente memorizar datos y normas en el colegio público”.
El grupo de diálogo, tras la exposición de Noella, comenzaba con la intervención de Pratixa Parmar (Jagruti Kendra). En su entidad, forman a las mujeres tribales en igualdad de género y ofrecen nuevas oportunidades de educación a sesenta niños y niñas en su escuela de primaria.
Por su parte, Meena D’Souza, que trabaja desde Creative Handicrafts en los programas sociales para la infancia de los slums de Bombay, comentaba que el desafío es «recogerles de su situación de pobreza y enseñarles, ya que pasan muchas horas en la calle”. (…) «Muchos vienen de sufrir violencia doméstica pero cuando conseguimos que vengan, ellos mismos animan a otros niños y niñas y, así, conseguimos ayudar cada vez a más”. (…) “Son niños y niñas con una gran falta de cariño. Por eso es difícil que confíen en nosotras y vengan a las Balvikas (centro educativo). Hoy cientos de ellos se han graduado y han conseguido un buen trabajo”.
De izquierda a derecha: Noella De Souza (Avehi Public Charitable Trust), Meena D’Souza (Creative Handicrafts) y Tratixa Parmar (Jagruti Kendra).
La mesa redonda sobre los retos en salud fue también muy interesante y, en ella, pudimos conocer más en profundidad el programa del Asha Seva Kendra (Jarckand) de la mano de Louise Mary Innasi: “La comunidad tiene muchos problemas diariamente, como el de no poder acudir a un centro sanitario, por tener que andar kilómetros. Cuando los hombres se ponen enfermos se les cuida más porque son los que trabajan (…) por eso fuimos a las aldeas y comenzamos el programa de salud integral”. (…) “Nuestro centro sanitario tenía ya cuarenta y cinco años y estaba en muy malas condiciones para atender a los pacientes. Nos lo iban a cerrar por no tener médico.
La Fundación Isabel Martín financió la construcción de un nuevo hospital y centro de salud y ahora los médicos quieren venir aquí a atender a los pacientes, tenemos técnico de laboratorio, microscopio. Con estas mejoras el gobierno sí que nos da dinero”. (…) “También vamos a las escuelas cercanas y les hablamos sobre el SIDA, la tuberculosis, hacemos tests de VIH… Estas enfermedades son grandes retos para nosotras también. Muchos hombres que trabajan fuera, vuelven a casa enfermos de SIDA y contagian a sus mujeres…”.
En el turno de debate, Jeannette Makenga lo dejaba muy claro: «queremos que no haya ningún niño desnutrido en nuestra comunidad. Por eso, creamos vínculos con las madres que tiene un gran impacto». Por su parte, Vaishali Patil sentenciaba: «una madre desnutrida trae al mundo un niño desnutrido que será un adulto con su futuro comprometido».
Las II Jornadas de Cooperación culminaban con el panel sobre Comercio Justo e Industria Textil. Fue Johny Joseph, director de Creative Handicrafts, el que abría el tema exponiendo el caso de la cooperativa fundada por Isabel Martín en 1994: “Estas mujeres ganaron en dignidad, pasando de recoger carbón en condiciones de esclavitud a trabajar en los talleres creando prendas, completamente autónomas y dueñas de su propio negocio”. Y añadía: «El cambio es pasar de esta infancia en la calle, sin educación, a niños y niñas en el colegio. Este es el impacto real del Comercio Justo”.
De izquierda a derecha: Johny Joseph y Elisabth Poojary (Creative Handicrafts), Mapi Castellano (Fundación Isabel Martín), Eva Kreisler (Campaña Ropa Limpia) y Javier Parcero (FAS).
A las conclusiones de Joseph le seguían las declaraciones de Eva Kreisler, coordinadora de la Campaña Ropa Limpia en España, a la que apoyamos económicamente desde hace 5 años. Kreisler ponía de relieve que trabajan investigando y denunciando “la situación de trabajadores y trabajadoras de la industria textil mundial». (…) «Apoyamos a los sindicatos a nivel internacional para conseguir una subida salarial y mejoras en sus condiciones laborales”.
El encargado de finalizar las jornadas fue Javier Parcero, de la Federación Aragonesa de Solidaridad, quien incidía en la necesidad de dar a conocer y divulgar el movimiento del Comercio Justo. Para ello, la entidad realiza “muchas acciones de sensibilización para la ciudadanía como la Lonja del Comercio Justo o talleres de educación en colegios de todo Aragón, porque lo importante es seguir trabajando, desde la base social, desde las ONGDs, todos juntos”.