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6 junio, 2018

Un cercado para proteger la vida de 250 niños y niñas

La Fundación Isabel Martín financia la construcción de un cercado para cerrar la Escuela Primaria Nuestra Señora de la Consolata de Sago (Costa de Marfil). El objetivo es garantizar la protección de los niños y brindar a los padres la confianza de que sus hijos van a estar bien protegidos de los animales y del tráfico rodado.

En total, la obra financiada por nuestra ONG asciende a un total de 6200€, un dinero que tiene incluso más valor si se trata de proteger las vidas de estos/as pequeños/as.

Sago es una población situada dentro de Costa de Marfil que ha tenido que ir superando numerosos desafíos, entre ellos la distancia a la ciudad más cercana, situada a unos 22 km, Sassandra.

Otro de los retos sociales que sostiene es que la mayoría de padres de la población trabaja en plantaciones de cacao, café y palma. Esto supone que acaben enviando a la mitad de sus hijos a la escuela y a la otra mitad al campo. En el caso de las niñas, la situación es mucho más dramática porque es más probable que permanezcan en el campo que en la escuela.

Alumnos/as de la escuela de Sago, Costa de Marfil

La zona ha vivido diversas guerras en los últimos años así como una fuerte crisis económica haciendo que las diferentes culturas de la zona hayan llegado a enfrentamientos. Es por ello que la educación en Sago es especialmente importante. A través de ella se permite mostrar a los/as niños/as que se puede convivir con otras culturas por lo que, al cercar la escuela, se crean espacios seguros para que los/as alumnos/as no dejen los estudios y estén a salvo.

Obra de parte del muro que rodea la escuela de Sago, Costa de Marfil.

La misión de este proyecto es conseguir una escuela bien amurallada para garantizar la protección de sus 250 alumnos/as de los animales y del tráfico rodado. Asimismo, se protege el jardín, los materiales escolares y las instalaciones.

Parte del muro que rodea la escuela de Sago, Costa de Marfil.

Trabajando en el muro que rodea la escuela de Sago, Costa de Marfil.

A día de hoy, desde enero hasta mayo, se ha construido la mitad de la valla. Unas obras que esperemos terminen pronto y poder, así, cumplir los objetivos marcados: la seguridad y el rendimiento académico de los/as niños/as de Sago.

Precisamente de esta escuela son las niñas que el año pasado quedaron subcampeonas de balonmano de Costa de Marfil en su categoría, ¡ahí es nada! La Fundación Isabel Martín también financió la equipación deportiva para que puedan seguir jugando y disfrutando de lo que más les gusta.